Esta parte es fácil. Cuando Satoshi hace referencia a este mecanismo, se refiere a una forma de proceder de la red de nodos por la que estos hacen su mejor esfuerzo por prestar el mejor servicio posible en cuanto a la velocidad de las transacciones, pero no garantizan que se realice en un tiempo concreto, es decir, no hay ninguna garantía sobre el tiempo que llevará procesar una transacción. Esto está directamente relacionado con el problema de las comisiones que comentamos con anterioridad: a más comisión, más rapidez del servicio; a menos comisión, el procesamiento es más lento porque los nodos dan preferencia a todas las transacciones de mayor comisión en su beneficio propio. Aun así, lo normal es que la mayoría de las transacciones sean procesadas en el transcurso de veinticuatro horas, que las transacciones de fees medios sean gestionadas en el transcurso de una o dos horas, y que las transacciones de fees altos sean gestionadas en cuestión de minutos.

A estas alturas de la historia, la red bitcoin tiene muchos momentos de saturación de transacciones, de modo que durante esos picos los fees también suelen ser muy altos. En general las transacciones con comisiones más bajas suelen no procesarse nunca. En este caso lo que ocurre es que pasados varios días (unos cuatro o cinco días), la transacción se limpia del listado de transacciones pendientes, y el dinero vuelve a aparecerle al remitente y se borra la transacción pendiente del lado del destinatario. Es decir, como si la transacción no se hubiese realizado nunca.